No, nombre, no, nada.

No todo es lo que parece,
no todo es siempre lo que me parece,
nunca nada es lo que a simple vista se cree...
cientos de posibilidades en abanicos de mil colores,
cada color una idea, cada color centenares de matices,
cada matiz una rama parecida a cada idea pero no la misma...
nunca la misma.
¿como encontrar el modo de estar segura de que o cual cosa?
de que o cual persona, de que o cual sentimiento, sensación...

Inevitablemente disfrazadas de diáfanas guirnaldas emocionales se enroscan en mi cuello para celebrar inexistentes fiestas en las cuales creo soy protagonista... aún asi cuando las, en realidad sogas negras del ''no ver más allá'' comienzan a ejercer presión en mi yugular, intento seguir creyendo erradamente que aún soy parte del festín; o que aunquesea tengo tarjeta de invitación.


¿y qué tal si no hago caso al latir de mi vena que comienza a estrangularse y termino por ahogarme en su vestidura azabache por verlas rosas, verdes, amarillas y violetas?.


La constante secreción de perfectos sentimientos, ideales momentos, utópicas retribuciones paraliza mis sentidos, convirtiéndome en una roca de exáctamente el mísmo material que del de la pared con que me choco, cuando caigo en cuenta de que el mundo de cuento con soles de mil brazos que me cobijan cada día; lunas brillantes, blancas y redondas; personas con sonrisas y en su corazón amores; pasto esponjoso como kilos de algodón,... no es más que la simple-estúpida manía de proyectar mi deseo en la realidad de un mundo obstinado por su egocentrismo.

Y duele golpearse...pero tengo que chocarme.
Y duele caer... pero tengo que subir
y duelen las personas... pero duelen porque siento/vivo.
Duele saberse rodeada por esta gente, en esta ciudad/país, con estos modos...sin escapatoria.
Hasta que pueda.


Ineludiblemente esta siempre presente.